Entre las muchas razones que se pueden argumentar para adquirir una vivienda en Barcelona está, sin duda, su belleza. La capital catalana es para muchos una de las ciudades más bonitas de Europa y del mundo. Su pintoresco Barrio Gótico, el fantasioso legado de Antoni Gaudí, su agradable y adaptado Frente Marítimo o su moderno barrio olímpico con su puerto deportivo a la cabeza son rincones que enamoran a quienes los visitan, sin olvidar las espectaculares vistas desde Montjuic o Collserola.

Pero además de ello, Barcelona es una ciudad con una red de comunicaciones de primer nivel, con medios de transporte que conectan todos los barrios: a Metro, Cercanías, taxi, autobuses urbanos, tranvía y bicicleta urbana se suman infraestructuras y facilidades para motocicletas y vehículos privados.

Además de ello, la calidad de los servicios públicos es palpable, tanto los del Ajuntament, la Diputació, la Generalitat y los de titularidad estatal. Entre estos servicios destacan hospitales de reconocido prestigio, como el Clínic o Sant Joan de Déu, centros de salud en todos los barrios y centros de enseñanza a todos los niveles: escuelas infantiles, institutos y universidades que abarcan todos los ámbitos del saber.

Las razones económicas son, por supuesto, de gran importancia. Barcelona es una ciudad dinámica, con muchas posibilidades de empleo en todos los sectores, incluso para aquellos que deciden emprender una aventura empresarial por cuenta propia. Y además, su seguridad y su animado ocio son otros motivos que convencen a muchos compradores.